ANTE EL RUIN ASESINATO DE LAS PERIODISTAS ANA MARÍA MARCELA YARCE VIVEROS Y ROCÍO GONZÁLEZ TRÁPAGA DE LA REVISTA CONTRALÍNEA DE MÉXICO.

OH ALLAH. Oh Espíritu del bien que remueves los escombros del mal y realizas el imposible para el bien. Que esto ocurra por el asesinato de las mujeres valientes y profesionales de las comunicaciones independientes de México, Ana María Marcela Yarce Viveros y Rocío González Trápaga, de CONTRALÍNEA de México al ofrendar aquellas sus preciosas vidas en aras de la libertad de expresión y de la existencia de PUBLICACIONES auténticamente libres e independientes en México, como el medio por el que fueron sacrificadas por sus miserables verdugos, que lo hicieron para atemorizar a los demás periodistas y voceros independientes por actuar con valentía e inexorables contra las injusticias. A ambas habrá que reconocerles: VUESTRAS HERÓICAS LUCHAS contra los gigantescos molinos de viento de la maldad de hoy no fueron en vano, no serán gratis, porque se alzarán y si es necesario RENACERÁN muchos otros más heróicos combatientes enemigos de la maldad que seguirán luchando y destruyendo a aquellos crueles monstruos MOLINOS DE VIENTO que se dedican a azotar a la humanidad; y entonces vuestras heróicas luchas, ustedes INMARCESIBLES BÓLIDOS CÓSMICOS a la manera de los hombres flameantes del Hospicio Cabañas de José Clemente Orozco simplemente pasarán y arrollarán sobre el polvo de quienes sucios y malolientes os se atrevieron a ofenderos con las armas de los mediocres, de la traición y de la cobardía, de la estupidez y de su infinita capacidad de ser imbéciles. Estos mezquinos de espíritu bien cobijados por las sombras del Poder Público y Político y de sus secuaces de ese poder, parapúblicos, parapolicías, la CIA o el FBI, sus corporaciones de lambiscones, contratistas, condottieri, mercenarios, etcétera, incrustados en los aparatos putrefactos de las administraciones públicas o privadas de México, Estados Unidos, España, Unión Europea o cualquiera otra pestilente guarida de que dispongan esos cobardes malhechores, asesinos y genocidas de los pueblos y naciones dignos como la república Federativa de Yugoslavia, la de Tito, Palestina, Irak de Saddam Husein, Afganistán, Colombia, México de Francisco Villa, Libia de Muammar Kaddafi, Cuba del Comandante Fidel Castro, etcétera, pero el fuego de los hombres llamaeantes como los ya descritos los alcanzarán y los pulverizarán. Desde Oaxaca 4 de septiembre de 2011.