jueves, 27 de enero de 2011

Madre de menor, victima de abuso sexual, señala de corruptos a dos ministros de la Suprema Corte.


La Señora Leticia Valdéz Martell señala la gravísima corrupción de los señores Guillermo Ortiz Mayagoitia y José Ramón Cossío Díaz en su función de ministros de la Suprema Corte de Justicia. Texto publicado en LaJornada: 27 enero 2011.


Denuncia corrupción de dos ministros de la SCJN

Este miércoles 26 de enero de 2011, en la sesión de la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), los ministros José Ramón Cossío Díaz y Guillermo Ortiz Mayagoitia se exhibieron de manera vergonzosa y denigraron el papel que la máxima instancia de procuración de justicia de nuestro país debe cumplir.

En efecto, al votar por conceder el amparo y la protección de la justicia federal a la maestra Magdalena García Soto, a pesar de estar demostrado en autos de los juicios 14/2010 y 15/2010, que esa persona entregaba a mi hijo, de cuatro años, a los sujetos que lo violaban en el gimnasio del Instituto San Felipe, de la ciudad de Oaxaca.

Es inaudito como los dos ministros se atrevieron a mencionar circunstancias inexistentes en los expedientes del juicio y al mismo tiempo no consideraron pruebas contundentes y eficaces jurídicamente. Lo único que puede explicar la aberrante conducta de estos dos ministros se encierra en una palabra: corrupción.

Que esos dos ministros de la Corte se hayan atrevido a defender a los pedófilos y pederastas que violaron a mi pequeño, que es lo que se encuentra en el fondo de la defensa de su cómplice primaria, significa que el poder económico y político corruptor seduce a quienes tienen la obligación de velar por que el estado de derecho en México prevalezca.

Mi abogado no pudo reprimir la exclamación de ¡Falso! al escuchar una de las varias mentiras que dijo en la sesión pública el ministro Cossío Díaz y mi indignación me obligó a ponerme de pie al terminar de votarse el caso de la violación de mi hijo y reclamarles su actitud indigna y parcial a los dos ministros que pretendían de hecho absolver a la maestra que tenía bajo su cuidado a mi hijo, y que en lugar de cumplir ese sagrado deber lo entregó a sujetos pervertidos que lo violaron.

En contraparte, la ministro Olga Sánchez Cordero presentó una ponencia en estricto apego a derecho y donde prevaleció el criterio establecido por la misma primera sala de la SCJN de considerar el interés superior del menor al analizar este tipo de casos y de dar preponderancia al dicho de la víctima del delito sexual, en este caso mi niño. De igual manera, el presidente de la sala, el ministro Arturo Saldívar Lelo de Larrea, votó en favor de la ponencia que propuso negar el amparo y la protección de la justicia de la unión a la cómplice de los autores materiales de la violación de mi hijo.

Sin duda que presencié una batalla entre dos ministros que defienden la legalidad y la justicia en la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Olga María Sánchez Cordero y Arturo Saldívar Lelo de Larrea, y dos ministros que denigran el papel de la máxima instancia del Poder Judicial en nuestro país: José Ramón Cossío Díaz y Guillermo Ortiz Mayagoitia.

El resultado fue que la votación se empató: dos votos por negarle el amparo a la cómplice de los violadores y dos votos en favor de los pedófilos. Se prolonga el áspero camino que inicié hace cuatro años en busca de justicia para mi hijo, pero no descansaré hasta que esa justicia llegue. Sólo espero que yo no sea el próximo objetivo de los criminales, como lo fue la señora Marisela Escobedo Ortiz, asesinada por demandar justicia para su hija.

Leticia Valdés Martell y familia. Abogados coadyuvantes: Felipe Canseco Ruiz y Fortino López Vásquez

1 comentario:

  1. pinches ministros corruptos y venales ojala y nunca les violen un hijo a ustedes, son unos proxenetas de la justicia mexicana que ustedes mismos tuercen y manipulan.

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